'(...) La belleza del ajedrez se asemeja a la de la poesía. Las figuras del ajedrez son un alfabeto que da forma a los pensamientos, y estos pensamientos se expresan abstractamente a través del diseño visual que ocurre en el tablero de ajedrez, al igual que en la poesía... Después de años de cercanía con jugadores de ajedrez y artistas, puedo decir honestamente que no todos los jugadores de ajedrez son artistas, mientras que no todos los artistas son jugadores de ajedrez'.(M. Duchamp)
