El periodo de 20 años que abarca este estudio ha sido calificado, dentro y fuera de Estados Unidos, como decisivo en la historia de ese país. Problemas de magnitud tan considerable como el asesinato del presidente Kennedy, la guerra de Vietnam y el escándalo de Watergate, hicieron necesaria una reconsideración que respondiera a una pregunta que estaba en el aire: "¿Cómo afrontar el sensible deterioro del sistema político norteamericano?".