El filósofo y poeta Luis García Trapiello vuelve a dejarnos la impronta de sus versos en este último poemario. Pensar que la lluvia escribe en el suelo, con sus gotas como teclas, y que luego borra en seguida lo escrito, me parece una imagen poderosa y casi tan melancólica como la lluvia que a Borges le traía de vuelta un pasado que ya no era.Acertar con una imagen poética, como esa de la lluvia que escribe y borra, viene a ser una operación de precisión comparable a la del científico que atrapa en una ecuación una ley del mundo físico. Ecuaciones y poemas, esa es la vida que queremos .
