Los artÃculos, documentos y declaraciones que aquà se reúnen muestran cómo los ideales y la polÃtica de Sut Yat-Sen y de su sucesor Chiang Kai-Shek no lograron encauzar la inquietud popular para sostener una revolución que de hecho ya habÃa triunfado. En cambio, los comunistas lograron sacudir la conciencia de la masa popular y pudieron orientar al pueblo hacia el socialismo.