A caballo entre la teorÃa polÃtica, la ética ecológica, el derecho y la filosofÃa polÃtica ambiental, Javier Romero hace un llamamiento a la cordura, un elogio a la democracia, una invitación al diálogo y una advertencia frente al embudo de crispación y sectarismo en el que parece precipitarse la polÃtica ante unos lÃmites planetarios que no deberÃan traspasarse en los próximos años.