Pasean por las calles de Moscú, indistinguibles del resto de la población. Se llaman a sà mismos los Otros: poseen poderes excepcionales, pueden internarse en el Crepúsculo (un mundo de sombras paralelo al nuestro) y están obligados a elegir entre el bien y el mal, la luz y las tinieblas, el dÃa y la noche. Ambos bandos conviven en una tensa guerra frÃa desde que suscribieron un pacto y una tregua. La Guardia Diurna -agentes de las Tinieblas- vela por su cumplimiento durante el dÃa. En cuanto oscurece, toman el relevo los agentes la Luz, la Guardia Nocturna. Pero el frágil equilibrio está a punto de romperse. Una serie de asesinatos inexplicables en la capital rusa tiene en jaque a los miembros de las dos Guardias, que se culpan mutuamente. Una joven bruja de las Tinieblas, perteneciente a los guardianes del dÃa, se enamora sin saberlo de uno de sus enemigos. Y un poderoso talismán, codiciado por todos, acaba de ser robado. Ambientada en una compleja y contradictoria Rusia postsoviética, donde los vampiros solo matan con licencia y un acto de maldad da derecho a usar la magia blanca, Guardianes del dÃa nos adentra en el original universo creado por Serguéi Lukyanenko, esta vez desde la perspectiva de las fuerzas del mal. Porque no hay luz sin tinieblas...No hay Luz sin Tinieblas.Serguéi Lukyanenko nació en 1968 en Kazajstán, antigua república de la Unión Soviética. Abandonó la carrera de psiquiatrÃa para dedicarse a la escritura. Empezó a publicar a mediados de los años ochenta y es autor de una treintena de novelas de fantasÃa y ciencia ficción. Ha recibido decenas de galardones por sus obras, y en 2003 fue nombrado mejor escritor europeo en la EuroCon de Turku, Finlandia. Lukyanenko se convirtió en el escritor más famoso de Rusia gracias a la «TrilogÃa de la Guardia»: Guardianes de la noche (1998), Guardianes del dÃa (2000) y Guardianes del Crepúsculo (2003). El éxito se tradujo en más de un millón de ejemplares vendidos en su paÃs, traducciones a más de diez lenguas y dos adaptaciones cinematográficas que marcaron un hito en la industria del cine rusa. Serguéi Lukyanenko vive en Moscú con su esposa y sus dos hijos.